Con esto, y más

"Y ahora, mientras pueda, me sostengo con ambas manos, por que siempre creeré que no hay nada que necesite, excepto a ti"

jueves, 12 de abril de 2012

Tuviste que llegar tú.


-    ¿Por qué huyes de mí?
-     No huyo.
-     Sí, sí lo haces. Dime, ¿Qué te pasa?
-     Tú. Eres tú lo que me pasa. Y no te asombres, esto es un lío para mí. A ti todo te parece muy fácil, pero no lo es. ¿Sabes cuantos meses me he pasado llorando intentando superar lo que los tíos me habéis hecho? ¿Sabes cuantas promesas me he hecho diciendo que algún día todo estaría bien? Conseguí convencerme de que podía ser feliz sola. Conseguí olvidar a los clavos sin necesidad de otros. He llorado a más no poder y únicamente me he podido refugiar en la música. Me había propuesto alejarme terminalmente de todo tío que apareciese, que todos iban a ser los mismos, con sus mismas técnicas y con sus mismos objetivos. Me hice creer que ninguno  de ellos podría hacerme feliz y pensé que nadie podría llegar y romper todo lo que pensaba. Pero no, tuviste que llegar tú. Con esa sonrisa de oreja a oreja, acompañada de esos hoyuelos. Con ganas de comerte el mundo, pero a mi lado. Sin necesidad de prisas, ni llantos, ni decepciones, ni malos rollos. Tú, el único que ha conseguido que me dé cuenta de que todos no son iguales. Él que consigue verle la gracia a todos los días de la semana, y el que dibuja ojos y piernas a los números. Sin sonrisas de papel ni corazones de piedra. Tú, el jodido idiota, que no hace falta que te diga que quiere, porque te demuestra que te ama.

No hay comentarios:

Publicar un comentario